“Licarayén”, escultura instalada en La Puntilla en Abril del 2014 en el marco de la Primera Versión del Carnaval del Sur, se transformó -desde el primer momento- en un ícono de Puerto Varas. Esta escultura fue creada por el artista boliviano y autodidacta de 29 años, Jaime López, quien reside en la ciudad de Puerto Varas desde el 2015.

Según López, “Licarayén” es una escultura que está en calidad de préstamo, que los montos que le proveyó Carnaval del Sur de ($250.000) eran los costos de traslado, hospedaje y alimentación y que en reiteradas ocasiones ha solicitado a la municipalidad hacer la mantención de la escultura, proponiéndoles también retirarla o que la compre el municipio por un monto de $30 millones. Finalmente, López señaló que tenía un comprador para la escultura y que la retiraría de la Puntilla mañana jueves a las 10 de la mañana.

En comunicado López señaló que “en mi calidad de artista y escultor voy a solicitar a toda la ciudadanía en general brindar la colaboración para el ejercicio de mis funciones como tal, ya que a la fecha no he tenido ninguna respuesta a las cartas y ningún interés por la escultura “Licarayén”. La intervención tendrá como inicio la toma del lugar a la 10:00 horas del día jueves 23 de noviembre en el sector la puntilla de Puerto Varas, este acto pacífico llama a participar a todos quienes tengan interés en defensa de los valores artísticos”.

Por su parte, Felipe Jofré, Asesor Jurídico de la Fundación y Agrupación Carnaval del Sur, declaró: “Fundación y Agrupación Carnaval del Sur expresan su profunda decepción y malestar, por el incesante “manoseo” que el Sr. López, ha realizado de la obra Licarayén. Ya se ventiló a nivel público las visiones de las partes, las que con ópticas diversas revelan en lo objetivo, que no hay nada pendiente entre el artista, Carnaval del Sur y, eventualmente, el Municipio de Puerto Varas. El Sr. López persevera en jactarse de una obra de su propiedad, cuando se ha transparentado que él es uno más de los colaboradores de esta obra; que, desde la plataforma institucional de Carnaval del Sur, puso a disposición de la comunidad puertovarina hace ya cuatro años atrás. Actualmente, se persevera en un resarcimiento económico del artista, como si éste no hubiese sido pago de su colaboración e intervención por Carnaval del Sur al pagar lo convenido, costear sus traslados y estadía; lo que nos hace concluir que más allá del fin altruista -que alguna vez identificaron a las partes- solo lo motiva el lucro, al insistir en un pago por su intervención que además se sitúa en un espacio público al igual que el mosaico de escalera Ricke. En ese sentido sería extemporáneo que luego de cuatro años las alumnas del taller de mosaico o, para el caso que nos convoca, el Sr. López, reclame pago por una obra ya instalada con financiamiento público y privado. En ese sentido debe saber la comunidad, que si el Sr. López intenta alterar, destruir o enajenar la obra, Carnaval del Sur, ejercerá todas las acciones legales que tiene a su haber”, finalizó.