El recientemente titulado Cientista Político de la Universidad de Los Lagos y puertovarino, Miguel Godoy, en el marco de la realización de su Tesis de Grado, trabajo que fue –además- parte de un proyecto Fondecyt, realizó una caracterización de los jóvenes abstencionistas de la comuna de Puerto Varas, mediante un estudio de enfoque cualitativo, en que se usaron grupos focalizados en reuniones con grupos de jóvenes menores de 30 años a quienes se les hicieron preguntas abiertas y se les entregó un cuestionario respecto de las razones que los llevaban a abstenerse de votar en las elecciones. El grupo de estudio fue de 54 jóvenes de la comuna de Puerto Varas.
“En la pasada elección presidencial del 2013 -declara el estudio de Godoy- el elemento que mayor debate produjo fue la baja participación electoral de los chilenos. A nivel país, ésta solo llegó al 42% de los votantes, mientras, en nuestra Comuna, la cifra es bastante similar, únicamente un 44% de los electores acudió ese día a sufragar. En otras palabras, menos de la mitad de las personas que tenían derecho a votar quisieron hacerlo. Por otra parte, a mi entender el futuro electoral no parece muy diferente, ya que los jóvenes (18 – 29 años) fueron los que en mayor medida decidieron abstenerse, y alcanzaron porcentajes de votación de un 21% a nivel país, esto es, 2 de cada 10 jóvenes fueron a votar en esa elección”.
“Es por ello, que se decidió buscar respuestas mediante una investigación, la cual tenía por finalidad comprender cuáles eran los motivos de los jóvenes Puertovarinos para decidir ausentarse de las elecciones. La anterior, evidenció algunas cuestiones preocupantes. La primera de ellas, fue el descubrimiento de una importante relación entre quienes no asisten a votar y la nula identificación con los partidos políticos del país, seguidamente, se reveló que el 70% de los jóvenes abstencionistas, conjuntamente dicen que sus opiniones no ejercen ninguna influencia en las decisiones que deben tomar los políticos. De igual forma, se constató la existencia de una relación entre una actitud, llamada “apatía política”, y la idea de que las elecciones no constituyen un hecho importante en sus vidas. Este último punto, resulta ser uno de los más sobresalientes, ya que las actitudes, construyen el comportamiento de los individuos, y funcionan como predisposición mental frente a un determinado objeto o hecho particular, en este caso las elecciones. Además, esta actitud es construida a través de las relaciones que se dan en el ambiente más próximo a los jóvenes, la familia, los amigos, la escuela, la Iglesia, el club deportivo, etc”.
“Por último, solo me queda agregar, que el futuro de la participación electoral no se vislumbra muy promisorio, por tanto, es que los padres deben incentivar a sus hijos a votar en este siguiente proceso eleccionario, considerando que no existe de parte de los colegios públicos una asignatura tan importante como la Educación Cívica, la cual se encarga de formar a los futuros ciudadanos del país. Finalmente debo recalcar, que de las elecciones depende escoger al futuro administrador del destino de todo un país”, concluyó.
