[OPINIÓN] "Puerto Varas se transforma" Por Pablo Hübner
Antes de la elección, escuchaba en diversas discusiones, que el enfrentamiento por el primer lugar sería entre Bahamonde y Aichele. Otros decían entre Aichele y Becerra. También escuchaba seguido de que Gárate sería segundo o tercero. Que para la próxima puede ser. Que estaba casi. También escuchaba que podía ser.
Al momento del conteo, el nombre Tomás Gárate empieza a sonar con más frecuencia que los otros nombres. En algunas mesas gana por el doble. Mientras pasan los minutos, los otros candidatos se fueron quedando. El primer lugar estaba entre Aichele y Gárate. Antes de que termine el día queda claro: Tomás Gárate es el próximo alcalde de Puerto Varas.
Muchas son las razones que pueden explicar su triunfo. También el por qué los otros perdieron. Esta es una columna de opinión y esto es lo que creo:
La campaña del movimiento Transforma era distinta a las otras campañas, tanto desde la circunstancia histórica, como en la manera en que se presenta. El escenario nacional era muy particular: entre el estallido social, el triunfo de apruebo y el inicio de proceso constituyente, además de la pandemia y los cuestionamientos al manejo de la emergencia. Básicamente, la nueva normalidad. En lo local, el movimiento Transforma irrumpe en la mitad del curso de un concejo municipal quebrado, que ya en ese entonces dibujaba sus potenciales candidatos, la mitad de la papeleta. La continuidad, representada por el actual alcalde, Ramón Bahamonde y el cambio, desde el concejo, en los nombres de Renato Aichele o Luis Becerra.
Tomás Gárate no venía del concejo municipal. No había sido parte del clima hostil de los concejos municipales. Tampoco había patrocinado una demanda por notable abandono de deberes contra el alcalde. No era parte del cansancio de la vieja política, ni del enfrentamiento, ni del establishment. No cargaba con el peso del ejercicio del cargo previo, con todo lo bueno y lo malo que eso significa.
Tomás Gárate logró representar otro tipo de cambio. Votar por él no era para que no gane el otro, porque el otro era malo y él era bueno. Su candidatura se desprende de esa reducción, mientras el enfrentamiento entre continuidad y cambio, desde el actual concejo municipal, se ve cada vez más como más de lo mismo. Las peleas cansan y a veces, no importa tanto quién tiene la razón. Más aun cuando son peleas largas que no resuelven nada, o bien poco.
Transforma, representado por Tomás Gárate y Rocío Alvarado, primera mayoría como concejala, con casi 4 mil votos, triunfa por su alegría. Por su humildad. Por su apertura para representar la necesidad de enfrentar problemas colectivos. Porque más que saber todas las respuestas, la invitación era a escuchar y entre todos, encontrar soluciones. Prevalece la convicción en los procesos de trabajo conjunto, antes que la individualidad de los candidatos, sus experiencias, rivalidades, o capacidades particulares. Prevalece el sentido de lo colectivo, lo compartido, lo de todos.
El triunfo de Transforma demuestra que en esta elección la disposición, desde su perspectiva esencialmente humana, era tan importante como el programa de gobierno y la oferta de soluciones. Saber escuchar más que decir. También saber decir no sé y no por eso sentirse menos. La libertad de no tener que saberlo todo permite enfrentar las dudas sin el ego que importa la necesidad de demostrar. La representación es una cuenca que tiene alma, así como la crisis del estallido social y la crisis de la pandemia tienen un cauce moral. No era tiempo de super héroes, sino de personas. Bajar el programa de gobierno ganador, articular los equipos, presentar metodologías de participación, probablemente serán parte del inicio de esta nueva etapa para la comuna.
Para quienes perdieron: Todos los candidatos lograron movilizar personas y representar sueños, más allá de sus resultados. En lo inmediato, reconocer el triunfo de Tomás Gárate y brindarle todo el apoyo es la nobleza que Puerto Varas necesita. Es de esperar que la transición de gobierno sea ordenada y colaborativa. Rocío Alvarado, Tomás Gárate y todo el equipo de Transforma: Felicitaciones. Ganaron y ganaron bien. La responsabilidad que tienen la merecen. No lo arruinen.
Por: Pablo Hübner
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