Con la necesidad de mejorar el estilo de vida de las personas con la enfermedad de Parkinson se creó la agrupación “Cuesta Arriba”, la cual fue constituida el 9 de mayo del 2014 y que agrupa a usuarios con esa enfermedad y sus familiares.

Eugenia Krul Kinesióloga de la Sala de Rehabilitación del CESFAM Puerto Varas, se refirió al trabajo desarrollado por la Agrupación Cuesta Arriba durante estos cinco años e invitó a las personas interesadas en participar de ella. “La agrupación ha avanzado mucho todo este tiempo, cada vez estamos llegando a más personas con este diagnóstico tratando siempre de innovar junto con el equipo multidisciplinario. Muy contenta con lo que hemos avanzado, siento que somos una herramienta terapéutica innovadora en nuestra región. Invitamos a las personas que tienen este diagnóstico a acercarse a la sala de rehabilitación para mayor información, las puertas siempre están abiertas”, indicó Eugenia Krul.

Por su parte, la presidenta de la Agrupación Cuesta Arriba ante la conmemoración de estos cinco años, María Cristina Gallardo Zúñiga, sostuvo “buenísima porque uno piensa que a uno no más le toca, pero uno se va dando cuenta que hay personas que pasan a ser como familia de nosotros y que uno no es solo en esta vida, y que tiene que dar gracias a Dios”.

Durante la ceremonia, se puso en marcha el proyecto buenas prácticas del Servicio de Salud Del Reloncaví, el cual fue postulado a través del programa de Rehabilitación del CESFAM y que comenzará a ser ejecutado desde este mes con el apoyo de profesionales de salud del CESFAM. Al respecto, la Terapeuta Ocupacional de la Sala de Rehabilitación del Centro de Salud Familiar Puerto Varas, Noemi Osorio, se refirió al proyecto que beneficiará a los socios de la agrupación. “Consiste en más horas para kinesiólogo y horas de psicóloga para los usuarios de la agrupación Cuesta Arriba. Van a tener dos veces a la semana terapia kinesiológica y una vez a la semana psicológica, para trabajar el enfrentamiento a esta enfermedad. Estamos súper contentos porque era una meta que teníamos hace mucho tiempo, no nos alcanzaban los recursos de la sala para cubrir la verdadera necesidad que tienen los usuarios con la Enfermedad de Parkinson y con este proyecto sentimos que pudimos llegar a lograr esta meta”, indicó Noemi Osorio.