- En la mañana de ayer, socios del Club Alemán, encabezados por miembros de la directiva, se dieron cita en la Plaza de Los Colonos en el centro de Puerto Varas para rendir un homenaje a los colonos alemanes representados en dicha plaza por el busto de Bernardo Philippi y Vicente Pérez Rosales, artífices de la colonización alemana.
En la sencilla ceremonia, Alejandro Droppelmann, Presidente del Deutscher Verein, señaló “ (…) que mejor momento, que un nuevo aniversario de nuestro Club, 139 años de ininterrumpida y prolífica vida, para recordar y mantener viva la memoria de quienes, entre otras cosas hicieron de éstas, otrora despobladas e inhóspitas tierras, una ciudad hermosa que sigue soñando con un próspero futuro. El tesón y ejemplo de Vicente Pérez Rosales, de Bernardo Philippi y tantos otros, particularmente esos inmigrante alemanes que en su anonimato creyeron en la posibilidad de un mundo mejor para sus familias lejos de su tierra natal, no pueden perderse en las aguas del olvido”.
“Con alegría vemos, que haciendo eco de nuestra historia y del clamor popular de nuestras instituciones y gente que así lo pidió, se ha izado nuevamente en nuestras calles, hoteles, comercios, casas e incluso en nuestra Municipalidad de Puerto Varas, la bandera alemana en conjunto a nuestro pabellón patrio, en este mes de Octubre, como muestra sincera e inequívoca de la vinculación cultural y patrimonial que siempre estará presente en el ser de nuestra ciudad”.-
Por su parte, Alex Winkler, encargado de proyectos del Directorio del Club Alemán, leyó una biografía de Bernardo Philippi, también agente colonizador de esta región, y finalizó su intervención con las hermosas palabras del colono Carlos Anwandter “Seremos chilenos honrados y laboriosos como el que más lo fuere, defenderemos a nuestro país adoptivo uniéndonos a las filas de nuestros nuevos compatriotas, contra toda opresión extranjera y con la decisión y firmeza del hombre que defiende a su patria, a su familia y a sus intereses. Nunca tendrá el país que nos adopta por hijos, motivos de arrepentirse de su proceder ilustrado, humano y generoso...”.