Hoy sábado 24 de marzo, a las 11 de la mañana, se realizará la inauguración de la muestra “Alotropía: cambio y giro” en el Centro de Arte Molino Machmar de Puerto Varas, la cual ha sido preparada por el Colectivo VARAestudio, conformado por Carlos Sierra (arquitecto), Alejandro Gómez (arquitecto) y Sebastián Baudrand (artista visual) y estará en exhibición en la Sala de Artes Visuales del CAMM.
El proyecto gestado por artistas locales, muestra distintas perspectivas del habitar en el sur de Chile.
Respecto de las bases que inspiran este trabajo colectivo, Carlos Sierra nos señala: “Este proyecto nace básicamente de una investigación que financia el Fondart Regional y en la cual nosotros nos propusimos hacer un libro. El trabajo, era un trabajo en terreno de poder tratar de observar lo que pasa en nuestra ruralidad despegado de lo que es la imagen patrimonial iconográfica de la empresa alemana instaurada en la región, sino que más bien un proceso como histórico que estableciera como los habitantes corrientes que no solamente fueron alemanes y que tienen toda una herencia, han llegado a establecer un modo de vivir en el sur. Entonces, este proyecto, aparte de la investigación, como el colectivo trabaja con el arte propiamente tal, se empezaron a desarrollar obras de arte, ejercicio que generó un material que es el que nosotros queremos mostrar en la exposición, y como dice el nombre de la muestra, la alotropía es la posibilidad de transformación de la materia, entonces, la apuesta es que nosotros tomamos estos elementos que son de uso corriente en el campo y se generan unas adaptaciones parciales, geométricas, conceptuales, que en cierta forma recogen estas nuevas construcciones que no son elementos funcionales como los que nosotros investigamos, sino que son objetos de arte pero que permiten y contienen toda este sentido de pertenencia de la ruralidad.
“La invitación, entonces, es a disfrutar como cuando uno va a un paseo familiar y te empiezas a encontrar como con una casa en una granja y observas un montón de cosas que te llaman la atención, que tiene que ver con cómo la gente tiene su huerta, su invernadero, su chanchera, la casa y todo ese imaginario que uno tiene de eso, está abstraído y traído a la sala de un modo relacional que el arte te permite entender y valorar.”
