• 09 de Noviembre

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[OPINIÓN] ¿Qué significa ser puertovarino?

Por Tomás Gárate

Alcalde de Puerto Varas

En el marco de la celebración de los 128 años de declaración de Villa de Puerto Varas


Les voy a contar una infidencia, hace unas semanas, al terminar una sesión de concejo municipal, un periodista me increpó con la frase: “es que ustedes los santiaguinos…”. En el momento me molestó bastante —soy puertovarino desde mis primeros meses de vida—, pero respiré hondo, decidí no caer en la provocación y me retiré. Ahora, con más distancia de la anécdota, se la agradezco, ya que me dejó pensando.

Si existe un “ustedes” tan tajante, ¿quiénes serían entonces el “nosotros”? ¿Los puertovarinos?, ¿Qué significa realmente ser puertovarino? ¿Se requiere haber nacido aquí, o basta con decidir quedarse y aportar? Las respuestas son tantas como experiencias de vida existen. Están los nacidos y criados, los que volvieron después de estudiar afuera, quienes llegaron en busca de un nuevo comienzo o quienes escogieron este lugar para criar a sus hijos. Familias alemanas, austriacas, chilotas, mapuche, argentinas, santiaguinas y de tantas otras regiones. Algunos llegaron en el marco de la colonización alemana, lo cual dio origen a su fundación y declaración como villa en 1897. Otros llegaron con la Lechera, con el Casino, con Varmontt, la industria salmonera, el turismo o la pandemia. Otros estaban aquí desde antes de todo eso. Cada cual con sus ilusiones, propósitos y adversidades, sumando piezas al mosaico que hoy somos.

En comunas que crecen tan rápido como la nuestra, el sentido de pertenencia entra inevitablemente en tensión. Sin duda los cambios demográficos, la congestión vehicular, la pérdida del comercio tradicional o el alza en el costo de la vivienda y de la vida son fenómenos que han impactado en nuestra vida cotidiana y nuestra cultura local, de ello se desprende un sentimiento natural de amenaza. Por eso, trabajar con toda nuestra fuerza para que Puerto Varas aproveche las oportunidades del desarrollo respetando su identidad, su calidad de vida y su escala humana es una tarea fundamental.

Pero si algo he aprendido en estos cuatro años como alcalde, es que Puerto Varas no se ha construido desde la exclusión, sino desde la suma de esfuerzos muy diversos. He visto cómo personas de orígenes distintos, a lo largo de nuestra historia, han dejado huella con su trabajo, su esfuerzo y su generosidad, levantando juntos la comuna que hoy compartimos.

En definitiva, por muy polémico que pueda ser, cada día me convenzo más de que ser puertovarino no depende del lugar de nacimiento ni de cumplir ciertos años de residencia, sino de la disposición con la que elegimos habitar esta tierra y relacionarnos con los demás. Ser de aquí es comprometerse con nuestra comunidad, cuidar el entorno, respetar la historia y aportar más allá de nuestro metro cuadrado individual. Cada persona que llega con disposición de construir y compartir enriquece nuestra identidad. Puerto Varas no es un “ustedes” contra un “nosotros”: es una comunidad con un patrimonio histórico que nos enorgullece, diversa socialmente y en constante movimiento. Desde sus múltiples raíces y orígenes, nuestro desafío es cultivar una memoria compartida, un presente común y un futuro del cual todos nos sintamos parte.

¡Feliz aniversario, querido Puerto Varas!