Un Musical autobiográfico de fines de los 70 de Bob Fosse. Ganador de 4 Oscares, 5 Nominaciones y  otros, como el BAFTA y la Palma de Oro. “El Show Debe Seguir” marcó una generación, despertándola al desquicio de una vida falsa, vacía de convicciones y frustrada en la persecución ciega  del poder y de la fama.

El despliegue histriónico de los caudillos de la Nueva Izquierda en Chile, el manejo experto del asambleísmo y de la construcción falsa de imágenes en los medios y las redes sociales, la impostura de un lenguaje forzado como la sonrisa de la foto y el contraste brutal de sus discursos con la ineptitud de su gestión, me recuerdan con tristeza el agobiante “Show” que fue la vida sin sentido del protagonista de este musical.

Temo que ellos no recibieron a tiempo esta sabiduría, ni menos la que con más profundidad debieron encontrar en las Ciencias y el Humanismo desde la educación superior…la misma que intentaron destruir. La perversión de convertir la vida en una mentira, un show amargo y vacío de propósito, buscando cautivar el imaginario de los demás para controlarlos, pero terminando esclavos de ese mismo espejismo. Qué desperdicio de juventud, potencial y esfuerzo! Y qué daño a nuestro país, regiones y comunas pueden  ocasionar desde lugares de poder. Baste recordar la pesadilla que unánimemente estas ovejas perdidas intentaron imponernos desde el octubrismo y la primera Comisión Constitucional.

Es verdad que la Industria del Engaño es tan antigua como los Viejos Imperios, y que la encontramos abiertamente en la política y más camuflada en la industria, en el ejercicio de las más diversas profesiones y hasta en las artes y la religión. Pero lo que estamos viviendo en Chile y en nuestra propia Comuna de Puerto Varas constituye una versión canallesca de esta lacra, al proyectar su destrucción (deconstrucción) inmisericorde sobre las Familias, las Escuelas y Los Barrios, condenando así la cultura y  la naturaleza.

Tal es el caso del “show” montado por nuestro municipio en torno al Vertedero La Laja, que intenta poner en el imaginario colectivo a un alcalde héroe, indignado por la trasgresión de sus principios ecológicos que el villano InterAseos realiza a espaldas de sus impecables “Transformadores”, quienes en una misteriosa operación lo descubren. La indignación es tal que  pareciera que de inmediato – aunque no sin antes asegurar la complicidad del Gobierno Regional - sin nueva licitación y sin consultar a la Contraloría, declara el término del Contrato  públicamente y por todos los medios, publicando con detalles los pormenores de su querella. Más aún, esta Asociación de nueve Municipios creada para fiscalizar la gestión de La Laja, sería “transitoriamente” y por modus proprio convertida en gestora y recaudadora del antes objeto de su fiscalización. Y qué dirá Contraloría de esta “movida” de eliminar la fiscalización y abrir la gestión directa, esta “nacionalización” que amenaza una crisis sanitaria provincial de no ser “excepcionalmente” aprobada?

La verdad es que nuestra administración comunal tuvo la oportunidad de desactivar la bomba sanitaria y ambiental de La Laja habiendo sido advertida a pocas semanas de asumir, pero a costa de perder el trampolín que ofrecía su Asociación de Municipios para catapultar la carrera política de nuestro alcalde a nivel provincial. Su elección fue clarísima y demostrada  a lo largo de los meses y años siguientes, cuando  el municipio en pleno blindó y fue cómplice en esconder y minimizar las crecientes denuncias ciudadanas a la superintendencia del medio ambiente  y al Ministerio de Salud. Su complicidad con el conglomerado Interaseos SA la llevó incluso a asignarle-no obstante las advertencias y reclamos- a ese conglomerado también la recolección de la basura en la comuna. Cuando el nivel del daño ya era inescapable y cuando las sucesivas sanciones de la Superintendencia al Municipio escalaron a niveles alarmantes para la campaña de reelección del alcalde, se produjo sólo días atrás una misteriosa denuncia anónima (similar a varias otras dadas a conocer desde el año 2022) que detonó el inicio de esta “Nueva Narrativa Comunal”.

Entonces pregunto a Puertovarinos y a Chilenos;  hasta cuándo el El Show Debe Seguir?